Infomed

Boletín Antinomia. No. 6. Mayo 2012

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En este Número

  

Editorial

Artículos presentados:

Oposición vs.  Gobierno de los Cien Días (Parte II) Josefina R.  Acosta de Para

Patología de Cristóbal Colón  Mae Calixto Díaz de Villalvilla

La Ciencia en la cultura nacional cubana. Su popularización (Parte II)  Felipe O. Moreira Seijos 

Actividades de nuestro Departamento

Historias junto a Piti Armando Peña Herrera

Efemérides

Un momento para los Cinco

Noticias recientes en la Universidad Virtual ¨Fajardo¨

Contactos con el Boletín

  

Grupo editorial

MsC. Juana Marisela Estrada Garzón

Dr. Felipe Moreira Seijos

Lic. Sonia M. Marill Santana

Lic. Yoslaine González Ramos

Lic. Ernesto del Valle García

  


 

EDITORIAL

Hemos sido interrogados sobre la elección del nombre de nuestro boletín, es conveniente entonces aclararlo. Múltiples opciones surgieron a la hora de nombrarlo, algunas fueron desechadas, como CATARSIS, por no ajustarse al tema en opinión de los redactores, luego serían descartadas otras como LIBORIO, por ser demasiado vago su significado, en fin casi cada miembro del departamento de Marxismo e Historia propuso el suyo, hasta que se determinó el que actualmente lleva: ANTINOMIA.

En filosofía es casi imposible explicar el origen de casi nada sin remitirse a la antigüedad grecolatina. El lexema nomia remite a la palabra ley, mientras que el prefijo anti incluso en el moderno castellano indica oposición. Puede significar entonces conflicto de leyes o leyes opuestas. De lo cual podría deducirse que la palabra antinomia hace referencia a un simple oxímoron, es decir, un sintagma nominal construido mediante el uso de dos elementos contradictorios, dígase: un silencio ensordecedor, un antisemita sionista o las concepciones arquitectónicas de Atila. Sin embargo la palabra oxímoron no fue elegida como título de esta publicación, simplemente porque su sentido expresa el uso de un recurso expresivo o literario más que el análisis de un problema filosófico.

La palabra antinomia tiene una significación medular a la hora de demarcar los métodos filosóficos para el análisis de la realidad y por ende la postura crítica, o no, que se tenga de esta. ¿De dónde proviene dicha demarcación? Su origen está en la evolución que experimentó la Filosofía Clásica Alemana. Los dos mayores exponentes de esta fueron Immanuel Kant y Georg Wilhelm Friedrich Hegel.

El primero realizó una exposición sobre el concepto de crítica, aquel pensamiento que evalúa las condiciones de posibilidad de otros pensamientos y culminó su sistema con un planteamiento que es fundamental para comprender la ciencia: la única ciencia posible es aquella que no se basa en constataciones empíricas sino que asienta ella misma las bases de sus axiomas.

Para Kant podía quedar fuera de la categoría de ciencia, incluso la Matemática. Para él los axiomas de esta no eran más que la repetición hasta el cansancio de constataciones hechas en la práctica –sabemos que los que lean esto se sentirán un poco sorprendidos o movidos a la risa por la dureza de este pensamiento, a los que así piensen les retamos a demostrar que 1+1=2 sin usar una comprobación práctica. La limitante del pensamiento kantiano estriba en que cualquier pensamiento mínimamente contradictorio quedaba desterrado de la preciada categoría de científico.

Es, en una comprensión dialéctica del pensamiento como la hegeliana, que puede comprenderse que el pensamiento ha de expresar las contradicciones de la realidad. La revolución copernicana iniciada por Kant –la que planteaba que es el pensamiento el creador del universo de objetos habitado por el sujeto pensante– solo llegaría al verdadero término de su giro, cuando comprendiera que las aparentes contradicciones, ante las que el estático pensamiento kantiano se quedaba alelado, no serían el límite del pensamiento científico, sino la base de todo análisis al que este se habría de dedicar.

En la Filosofía Marxista la única manera de trazar una frontera entre la ortodoxia y el pseudomarxismo es ateniéndose al método utilizado por sus portadores. Solo puede ser verdaderamente crítico y por tanto revolucionario, aquel que parte del análisis de un pensamiento compuesto por dos juicios igualmente válidos pero de sentido contrario, aquel que comprenda que la ANTINOMIA es un momento necesario del espiralado movimiento de superación, a la hora de cambiarnos a nosotros mismos y a nuestro medio.

 


 

ARTíCULOS PRESENTADOS

 

Oposición vs.  Gobierno de los Cien Días (Parte II)

Por: Josefina R.  Acosta de Para

E n  octubre de 1933 se pertrecharon en el lugar 467 oficiales, 140 de ellos de la marina de guerra y 5 alistados1; Estos amotinados rechazaron los diferentes ofrecimientos del gobierno para deponer su  actitud provocando el asalto por tierra con fuego de fusiles,  cañones y  ametralladoras  apoyado por los proyectiles del buque Patria desde aguas cercanas al malecón habanero hasta su total rendición. Coincidentemente Welles estuvo residiendo en el hotel días antes del asalto.

 De singular importancia  fue el alzamiento,  en noviembre del mismo año, del campamento de Columbia y la  sublevación y ocupación de las estaciones de policía de La Habana por esa misma oficialidad, la policía y miembros del ABC.  Los sublevados lograron apoderarse del Cuartel de Dragones, del de San Ambrosio, el Castillo de Atarés, la jefatura de la Policía Nacional y  4 estaciones más de policía en la capital. Parte de los complotados tomaron aviones del aeródromo de  Columbia para bombardear el Palacio Presidencial y la Cabaña así como otros lugares de la ciudad.

El presidente Grau ante la gravedad de los hechos adopta decisiones importantes en Palacio,  ordenando ubicar antiaéreas en la azotea lo que rechazó el ataque logrando la retirada de los aviones. Los bombardeos a los distintos puntos de la ciudad no tuvieron los resultados esperados. 

Poco a poco el cerco del ejército fue derrotando la sublevación. Muchos sediciosos lograron escapar refugiándose en el Castillo de Atarés. A la mañana siguiente comenzó el ataque contra la instalación desde las unidades navales Cuba y Patria en aguas de la Bahía habanera, sumándose morteros, granadas y cañones situados en lugares circundantes. El ataque concluyó con la rendición de los sublevados y el reconocimiento a la prensa por parte de Guiteras, Secretario de Gobernación, Guerra y Marina, de 150 muertos y más de 200 heridos en la acción. Otras fuentes hablan de 500 los muertos, muchos más heridos y un total de 800 prisioneros2.

Hay que considerar además a los miembros del  PC  y la CNOC quienes también desempeñaron un papel opositor en la escena política de aquellos meses finales  de 1933.

Con la caída del gobierno de Machado ambas organizaciones adquirieron un status casi legal, disponiendo de locales,  publicando manifiestos y periódicos, realizando mítines y actos de calle;  pero su posición política impuesta en gran medida por el Buró del Caribe supeditado a la Internacional Comunista, lejos de ayudar al desenvolvimiento del gobierno y apoyar las medidas de beneficio popular que se venían decretando, con  sus acciones y propósitos  entorpecieron y enrarecieron el ambiente creándole mayores dificultades al estado.

Sus aspiraciones respecto a la creación de los soviets, sus pretensiones de erigirle un busto a Julio A. Mella en el Parque de la Fraternidad, sus exigencias laborales y fomentar   las huelgas y de promover actividades comunistas, eran darle argumentos a Welles para la intervención3. Su calificación del gobierno como demagógico, burgués terrateniente o burgués latifundista los separó de éste y alineó paradójicamente estas organizaciones, al lado de la reacción, del ejército y del embajador Sumner Welles.

En esta acuarela de posiciones no podemos obviar que tanto la Pentarquía como el Gobierno de Grau San Martín fueron gobiernos improvisados, ninguno de sus integrantes, incluyendo al presidente, tenían pretensiones de acceder a la máxima magistratura del país; fueron gobiernos surgidos al amparo de los sucesos del 4 de septiembre, por lo tanto, no existía un Programa de Gobierno, no existía dentro del grupo un líder que impulsara el proceso, no había una idea cabal de lo que se quería realizar. Muchas de las medidas adoptadas fueron coyunturales ante una situación específica

Raúl Roa participante y cronista de la época dio su testimonio sobre estos 123 días de gobierno:

Hay ya suficiente lejanía para juzgar, serenamente el gobierno presidido por Grau San Martín desde el 10 de septiembre de 1933 hasta el 15 de enero del año siguiente. Los testimonios desaforados de sus enemigos suministran una imagen estigmática de esa enmarañada, fluctuante, convulsa y aleccionadora experiencia…. lo considero injusta en cuanto falsifica el carácter del gobierno de Grau San Martín, mide por un mismo rasero a los intereses y  grupos que lo sustentan y a los que se le oponen, no discierne el alcance popular de sus medidas, solo ve la incapacidad, la petulancia, la flaqueza y la arrebatiña que lo mina, ignora la gallarda y trascendental postura de la delegación cubana en la Conferencia Panamericana de Montevideo, pasa por alto la ingente labor revolucionaria de Antonio Guiteras…

…El gobierno de Grau San Martín no fue, ni podía ser, por su estructura, composición y objetivos un gobierno revolucionario...sin embargo ha sido hasta hoy el único gobierno cubano que intentó remover la estructura colonial de la república…No se le dio un minuto de respiro. Vivió en acoso perpetuo, Fue combatido a sangre y fuego por la embajada norteamericana, los oficiales depuestos, el ABC , la vieja política, el alto comercio español, las corporaciones económicas, las empresas extranjeras, los monopolios de servicio público, el Partido Comunista, la Confederación Nacional Obrera de Cuba, el estudiantado de izquierda y casi la totalidad de la prensa. No tuvo más defensa militante que las aguerridas huestes del Directorio Estudiantil Universitario, ni más pregón que sus propias obras, insidiosamente desfiguradas por la reacción, el imperialismo y la izquierda marxista en absurda coincidencia….4

Como planteábamos al inicio, a pesar del tiempo transcurrido, cuando se habla de los aspectos positivos de este gobierno solo se menciona a Guiteras, su Secretario de Gobernación, sin percatarnos que detrás de éste se encontraba la figura del Presidente quien no en una sino en varias ocasiones fue el impulsor de muchas de las medidas decretadas  y también  de las posiciones adoptadas por ese gobierno.

El propio Grau San Martín resumió así su gestión de gobierno: “He dictado leyes que fueron buenas para el país. No me he sometido a ninguna embajada extranjera. He tratado de beneficiar a la gente y he usado una mano firme ante los monopolios”5.

Del gobierno de los Cien Días en el escenario político del país en los siguientes 15 años, surgirán tres presidentes constitucionales: Fulgencio Batista Zaldívar, Ramón Grau San Martín y Carlos Prío Socarrás. Pero sus desventuras y aventuras serán otra historia.

1 Briones Montoto, Newton. Esperanzas y desilusiones. Una historia de los años 30, Editorial Ciencias Sociales, la Habana, 2008 pp. 265

2 Op. Cit (2) pp. 307

3 Op. Cit (2) pp. 225- 233

4  Roa García, Raúl. La Revolución del 30 se fue a bolina. Editorial Instituto del Libro, La Habana, 1969, pp. 289 – 243

5 Op. Cit. (1)  pp. 312

 

 

Patología de Cristóbal Colón

Por: Mae Calixto Díaz de Villalvilla*

T odos en algún momento hemos escuchado sobre su vida; conocemos que fue un importante navegante, cartógrafo, Almirante, Virrey y Gobernador de las Indias al servicio de la Corona de Castilla. Sabemos que entre sus descubrimientos más significativos está el hallazgo de América, además de  haber sido el primero en trazar una ruta de ida y vuelta hacia Europa utilizando las corrientes marinas del océano Atlántico, vía que actualmente se utiliza. Sabemos mucho de la vida de este personaje, sin embargo  ignoramos el hecho de que muchas fueron las enfermedades que afligieron a Colón a lo largo de su inquieta vida; tantas que acabaron por degenerarlo física y mentalmente, culminando sus días pobre, solo y totalmente enfermo. En vísperas del aniversario 506 de su fallecimiento, se comenta acerca de los enigmas de su muerte, de todas las enfermedades que padeció, así como del verdadero lugar donde descansan sus restos mortales.

Los testimonios de sus parientes cercanos narran que fue un hombre  alto, fuerte, de cara larga, nariz aguileña,  ojos garzos, que quienes le conocieron en su juventud supieron que llevaba el pelo rubio, pero que ya a la edad de treinta años le tenía cano. Fue un hombre amable, educado, alegre, aventurero, con una gran fe religiosa, moderado en el comer, beber, vestir y calzar. ¿Quién imaginaría, entonces que un hombre con tales características físicas padecería tantas enfermedades?

Todo comenzó en agosto de 1476, cuando su embarcación naufragó a unas dos leguas de la costa portuguesa y tuvo que nadar por largo tiempo antes de alcanzar tierra. Contaba entonces con 25 años de edad. Los testimonios sobre aquel suceso afirman que llegó exhausto y sus miembros tullidos por el esfuerzo, la humedad y el frío. A partir de aquí se desencadenó una serie de crisis de artritis reactiva, cada vez más dolorosas, que degeneraron progresivamente cada una de sus articulaciones. Estuvo postrado en varias ocasiones. Con el pasar de los años se hizo imposible su bipedestación; cada vez que se levantaba, caía. Tanto empeoró su situación que, en su cuarto  y último viaje, fue necesaria la construcción de un camarote especial en cubierta, desde donde Colón pudiese establecer sus órdenes.

Durante su Segundo Viaje al Nuevo Mundo, en el año 1493, el Almirante sufrió su primera enfermedad contagiosa: la llamada influenza suina, responsable de la gripe española, causante de más de 30 millones de muertes solamente en Europa. Todos los tripulantes cayeron súbitamente enfermos, por lo que fue necesario detener por unos días la travesía.

Al año siguiente, durante su viaje desde Jamaica hacia la Isla de Santo Domingo, Colón sufrió una grave enfermedad contagiosa: la Fiebre Tifoidea. El tifus afectó seriamente al Almirante: “…le privó de la vista, de los otros sentidos y del conocimiento.”1 Descripción realizada por su hijo, Hernando, respecto al estado de severidad de dicha enfermedad. Vale destacarla como la primera causa de muerte  durante la navegación a América, no sólo de españoles, sino también de ingleses y franceses.

En el año 1498, cuando su embarcación se encontraba cerca del entonces Golfo de Paria (actual costa de Venezuela), Cristóbal Colón sufrió serias complicaciones conjuntivales, diagnosticadas como Conjuntivitis Hemorrágica. Según Bartolomé de las Casas:

 …se le llenaron los ojos de sangre, parecía que lloraba sangre,  (…) pocas fueron las noches que pudo dormir a causa de las molestias oculares.2

No existe prueba alguna que reafirme ciertamente que Colón padeció alguna Infección de Transmisión Sexual. No fue un hombre promiscuo. Sin embargo, además de que presentaba síntomas parecidos a la sífilis, era común la propagación de tales enfermedades entre los marineros de la época. Por todo lo cual, es muy seguro que nuestro Almirante haya padecido de uretritis, causada por un contagio sexual.

Actualmente, se afirma que el verdadero padecimiento de Colón a lo largo de toda su vida fue el llamado Síndrome de Reiter, una enfermedad que abarca todo lo anteriormente descrito, que fue progresando y arruinando el estado físico y mental de este personaje. Entonces, según esta teoría, no fueron enfermedades aisladas, sino un grave síndrome que lo deprimió inmunológicamente, por lo que se dice que su causa de muerte puede haber sido una insuficiencia cardiorrespiratoria.

Finalmente, Cristóbal Colón, falleció el 20 de mayo de 1506, a los 55 años de edad, en la ciudad española de Valladolid. Fue enterrado, por propia solicitud de testamento en Santo Domingo, donde se unió luego su primogénito Diego. Allí permanecieron los restos durante 113 años, hasta que España cedió a Francia gran parte de dicha isla. Posteriormente se acordó su entierro en La Habana, y fueron recibidos  el 13 de enero de 1796 por el Gobernador y Capitán General don Luis de Trespalacios y Verdeja.

En la travesía fueron cambiados de lugar desde el navío de San Lorenzo, hasta una falúa y otra más, y luego a dos botes de los buques de guerra, hasta que al fin llegaron a puerto habanero. Los cuerpos fueron remudando hasta dejarlos colocados en un panteón que se levantó en la Catedral de La Habana.

Al culminar la dominación española en Cuba, en el año 1898, fueron exhumados los restos, con el propósito de trasladarlos nuevamente hacia España. En el documento que lleva las memorias del acto, se registró que para gran sorpresa de los presentes, en la bóveda solamente existía una caja y al parecer en dicha caja sólo había un poco de tierra y unos pequeños huesos que parecían de yeso. Así fueron embarcados rumbo a España los tan sospechosos y profanados restos de Cristóbal Colón y fueron enterrados en Sevilla.

Pero en la primera década del siglo XX apareció en la Catedral de Santo Domingo una misteriosa caja de plomo que contenía fragmentos de huesos y llevaba la inscripción Varón ilustre y distinguido Cristóbal Colón. Dichos restos fueron dispuestos en el llamado Faro de Colón en la misma capital de la Isla. Entonces, ¿dónde están verdaderamente enterrados Colón y su hijo?

Para responder a dicha interrogante  se propuso un estudio reciente que  pretendía tomar muestras de ADN de ambos sepulcros, donde se detectó que los restos que permanecen enterrados en Sevilla desde 1898 sí corresponden con Cristóbal Colón. Todavía se espera que las autoridades de la República Dominicana permitan el estudio de los restos atribuidos al Almirante que están en ese país, lo cual permitiría completar el misterio sobre quién yace sepultado en el Faro de Colón.

*  Estudiante, 2do Año de Medicina.

1 Colón, Hernando. Historia del Almirante Don Cristóbal Colón. (1536-1539) Cap. I.

2 de las Casas, Bartolomé. Historia de las Indias. Madrid: Imprenta de Miguel Ginesta, 1875. Edición del Marqués de la Fuensanta del Valle.

 

 

La Ciencia en la cultura nacional cubana. Su popularización (Parte II)

Por: Felipe O. Moreira Seijos                     

D El primer gran destello de la ciencia en Cuba, el descubrimiento del agente transmisor de la fiebre amarilla, aunque el resultado de las investigaciones fue presentado en 1881, no fue hasta después de 1898, con la intervención norteamericana en la guerra hispano-cubana, ante el azote del mal en sus tropas, que el bacteriólogo militar de ese ejército, Walter Reed, retoma la teoría de Finlay, y William Gorgas aplica masivamente insecticidas y acaba con el peligro de la enfermedad para Cuba y otros países azotados en el hemisferio. Cuestión que demostró que, aunque existía en el país una habilidad científica de alto nivel, las condiciones coloniales no ofrecían las posibilidades para desarrollarlas.

Demostró además que un país que no posee el control de sus recursos no puede alcanzar una ciencia que beneficie a toda la población. Además,  justifica por qué la Revolución Cubana le otorgó un papel predominante a la ciencia, sin lo cual no se había logrado el desarrollo científico alcanzado.

Los países en vías de desarrollo están obligados a tener presente los frutos de la ciencia y aproximar los puntos de contacto entre teoría y práctica, entre ciencia y tecnología, en parte para revertir la situación económica que confrontan y comparten sus pueblos, pero además, en el caso de Cuba, para llenar lagunas y descubrir sustitutos de productos que el bloqueo sufrido por tantos años le impide adquirir en el mercado.

En los años finales de la década del 50 la visión popular de la ciencia en el hemisferio occidental era de muy baja estimación. Las contribuciones de la medicina nuclear y el uso pacífico de la energía nuclear eran opacadas por las constantes prueba de las armas atómicas. Ante todo estaba latente el peligro de una confrontación nuclear incontenible, las experiencias de Hiroshima y Nagasaki parecía superar decisivamente los aspectos positivos. Son los años en que internacionalmente está en boga el señalamiento de la necesidad de una educación científica, dada la actitud negativa hacia la ciencia entre los intelectuales literarios y en la sociedad de esa época en general.

Muchos fueron los pensadores que trataron a la ciencia desde la percepción de una filosofía social, y solo posible en el mundo desarrollado e industrializado. Presentaban a la ciencia como una fuerza de constante peligro. Para ellos, el enfoque limitado que los científicos empleaban, conjuntamente con la falta de habilidad literaria, o de deseo de comunicar su especialidad al lector no científico, exacerbaba una forma muy seria de incoherencia social. Ante estos inconvenientes, para lograr que la ciencia se convirtiera en una parte considerable de la vida de la sociedad cubana, había que promover la percepcción de que era necesaria y factible, además de constituir un elemento constructivo.

Un estímulo para la promoción de la ciencia en el sistema educativo cubano fue la situación creada en los servicios de salud, por la emigración hacia Estados Unidos de más de la mitad del personal médico, personal que además siempre fue deficitario y con una ubicación netamente urbana. Urgía por ello compensar rápidamente esa pérdida y formar personal médico para superar la situación  de los servicios de salud de la Cuba neocolonial.

Este aspecto de emergencia nacional, aparejado a factores de la memoria histórica de la cultura cubana contribuyó a fomentar el entusiasmo por la ciencia, particularmente en el campo de la medicina. Cuba es de los hechos, totalmente libre para atender este tipo de necesidad nacional, pues el desarrollo de nuestra ciencia es una expresión de soberanía, y no existen las limitaciones asociadas con la actividad científica desintegrada y dirigida desde el exterior.

Muestra de ello fue la formación, en la década del 60, de equipos de expertos, técnicos y trabajadores enfrascados en la recuperación y producción de piezas de repuesto. Ya en la década de los años 80 Cuba disponía de millares de científicos, ingenieros, químicos, arquitectos. Técnicos y trabajadores especializados. Actualmente cuenta con un movimiento que se expresa en el Forum de Ciencia y Tecnología, en el se presentan miles de proyectos para solucionar igual número de problemas surgidos en los centros de producción y en los servicios.

En el sector de la salud, el Dengue Hemorrágico, surgido en 1981, y por primera vez en el hemisferio, causó muchas muertes y alarma en la población. La respuesta del sistema de salud incluyó la educación a la población sobre la identificación de los síntomas, y las formas de eliminar el habitad de las larvas del Aedes Aegypti, lo que constituyó un precedente en el tratamiento de enfermedades no controladas mediante vacunación.

Además se alcanzó una distribución, más adecuada de los servicios médicos con la institución del Médico de la Familia, organización que asegura un alto grado de asistencia médica.

También en el año 1980 se dio un salto hacia delante, en los que reafirma la asociación  de la ciencia con el mejoramiento de la salud pública, ahora a un nivel de ciencia y tecnología enteramente nuevo en el contexto caribeño, al producir el primer producto por vía biotecnológica del país: el interferón leucocitario.

En nuestro país la ciencia funciona como pilar central en el espíritu nacional. La ciencia actúa como modelo, y como desafío para otras áreas de la cultura, lo que constituye una evidencia de la integración de los principios científicos. El fomento constante e inquebrantable de una ciencia al servicio  de las masas es apoyado entusiastamente por la población. Las especiales dificultades económicas de los años que corren han contribuido a la defensa de la conciencia científica entre las amplias masas. Esto es posible porque los científicos no están aislados en un mundo particular. La ciencia cubana se conforma en un sistema científico-técnico que interactúa entre sí, con la comunidad, con las instituciones educacionales, y los centros de producción y los servicios.

 


 

ACTIVIDADES DE NUESTRO DEPARTAMENTO

 

 - La Cátedra Martiana y el Departamento de Marxismo e Historia de la Facultad de Ciencias Médicas: “Manuel Fajardo” convocan al concurso: Martí y los estudiantes, en conmemoración a las diferentes fechas importantes que en los meses de abril y mayo tendrán lugar, en lo que a Nuestro Héroe Nacional se refieren. Para más información llamar al teléfono 8326550 ext. 135 o contactar con los siguientes correos: yoslaine@infomed.sld.cu (de la presidenta de la Cátedra Martiana: Yoslaine González Ramos) o maricelaeg@infomed.sld.cu (de la vicepresidenta de dicha cátedra y Jefa del Departamento: Juana Marisela Estrada Garzón).

- Nuestro departamento continúa impartiendo el Curso de Postgrado sobre Problemas Sociales de la Ciencia y la Tecnología para aquellos profesionales que aspiran a cambio de categoría docente y mínimo de doctorado.

- El próximo 10 de mayo nuestra Jefa de Departamento, Marisela Estrada, realizará una disertación acerca de las experiencias y perspectivas del Boletín Antinomia; como parte del Coloquio La Comunicación en los Procesos de la Universidad, a celebrarse la mañana de dicho día en los Laboratorios Novartis  (21 y A, Vedado).


  

Historias Junto a Piti

Por: Armando Peña Herrera

Al caer la tarde situamos las postas como de costumbre. Cerca la media noche salí a recorrer las postas. Estando en una de ellas, conversando bajito con el compañero de guardia, vimos que por el camino con dirección a la Botella venía subiendo, a hurtadillas, un desconocido. Esperamos que estuviera bien cerca, le pedimos la seña y no supo contestar. La posta le ordenó levantar las manos y acercarse. El hombre, muy asustado y nervioso, llegó junto a nosotros. Lo registramos de pies a cabeza y lo condujimos al campamento. En el interrogatorio confesó ser uno de los alzados a las órdenes de Manuel Beatón. Según sus propias respuestas llegamos a la conclusión de que el sujeto se desmoralizó cuando vio que tras la banda a la que pertenecía iba un ejército de hombres y de mujeres persiguiéndolos, y les teníamos copados todos los caminos. Su última decisión fue abandonar el fusil y desertar, tratando de escapar hacia Bayamo.

Al día siguiente ya no teníamos nada de comer y la mujer del campesino dijo:

--Les voy a preparar unos guineos.

Yo me puse muy contento, tenía un hambre terrible. Ya en mi mente se representaba tremendo fricasé, pero la mujer me dio, en un plato, dos plátanos hervidos. Después que me los comí le pregunte:

--¿Y los guineos?

--Ya te los comiste – respondió tranquilamente.

Yo no sabía que en la parte oriental le llamaban guineo, al plátano. Por que en Caibarién, Villa Clara, de donde soy nativo, y en La Habana, donde vivía en ese momento, se conoce por guineo a un ave que corre velozmente por el monte.

Yo no sabía que en la parte oriental le llamaban guineo, al plátano. Por que en Caibarién, Villa Clara, de donde soy nativo, y en La Habana, donde vivía en ese momento, se conoce por guineo a un ave que corre velozmente por el monte.

Al día siguiente el teniente guía me entregó $ 500.00 para buscar comida para la tropa. Salimos temprano, rumbo al campamento del El Hombrito, en ese lugar se encontraban Gabino González, Humberto Pérez Costa, y Miguel Ángel Dous con el resto de las milicias de la Casa del 26 de Julio del Cerro. De nuevo tuve un altercado con el señor Gabino González, pues nos enteramos de que había tratado de intimidar con un revólver  38 a un prisionero en el interrogatorio. Cuestión que le impidieron los compañeros que estaban presentes. Le expliqué que a los prisioneros había que aplicarles las leyes revolucionarias y que la Revolución nos había enseñado a respetar a nuestros enemigos. Gabino se mostró arrogante como siempre pero dejé bien claro, delante de los demás combatientes, cuál era el tratamiento que debíamos darle a nuestros prisioneros.

De inmediato me reuní con los demás jefes y decidimos la sustitución de Gabino González como jefe de la tropa, ocupando su lugar José Picot.

Continué rumbo a Limonar, con Brundora, aún debía cumplir la misión de buscar comida para la tropa….

 



Efemérides

 

  3/5/1960  Llegan a la Sierra Maestra los primeros maestros voluntarios ante el llamado hecho por Fidel.

  7/5/1839    Muere en México, el poeta revolucionario cubano, José María Heredia.

  8/5/1935    Son asesinados en el Morrillo, Matanzas, los revolucionarios Antonio Guiteras y Carlos Aponte.

14/5/1955  Fidel Castro y los demás asaltantes del Moncada son puestos en libertad después de diecinueve meses de reclusión. La tiranía batistiana, presionada por las masas, tuvo que concederles la amnistía.

17/5/1959  En La Plata, Sierra Maestra, el Gobierno Revolucionario promulga la primera Ley de Reforma Agraria.

19/5/1895  Cae nuestro Apóstol, José Martí, en el combate de Dos Ríos, Oriente.

29/5/1899  Diego Vicente Tejera funda el primer Partido Socialista de Cuba.

          31/5  Día Mundial sin Tabaco.

 


 

UN MOMENTO PARA LOS CINCO

 

Publica The Washington Post anuncio que exige liberación de los Cinco

En todo Washington DC y sus alrededores, los lectores del Washington Post abrirán la edición del lunes, 30 de abril para ver un mensaje dramático de una página completa exigiendo la libertad de los Cinco Cubanos, injustamente encarcelados en las prisiones de Estados Unidos desde hace casi 14 años.

El anuncio es un esfuerzo encabezado por el Comité Nacional para Liberar a los Cinco Cubanos y con el apoyo de más de 325 organizaciones e individuos que ayudaron para publicar el anuncio.

Los principales líderes políticos y las organizaciones de derechos humanos que se citan en el anuncio, incluyen: el teniente coronel Lawrence Wilkerson, ex jefe de Despacho del otrora secretario de Estado Colin Powell, el ex presidente de EE.UU. Jimmy Carter, el ex fiscal general de EE.UU. Ramsey Clark, Miguel D’Escoto, presidente de la Asamblea general de la ONU desde 2008 hasta 2011, Amnistía Internacional, Alice Walker, autora y Premio Pulitzer, 10 premios Nobel, y el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre Detenciones Arbitrarias.

La mala conducta del gobierno de EE.UU. en la persecución política de los Cinco se expone en el anuncio también. Desconocido por los Cinco Cubanos y su equipo de defensa durante el juicio, los periodistas de Miami estaban secretamente en la nómina del gobierno, mientras que demonizaban a los Cinco en los medios de comunicación, lo que “va al corazón de la condena injusta de los Cinco.”

Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y René González fueron detenidos el 12 de septiembre de 1998 por el FBI, y se los sometió a un proceso en EE.UU. por motivos políticos que han sido condenados en todo el mundo. El juicio tuvo lugar en el medio ambiente virulentamente hostil de Miami, a pesar de la petición de la defensa para cambiar la sede.

A pesar que la alerta pública sobre los Cinco ha crecido desde su detención, su caso todavía está lejos de ser ampliamente conocido en los Estados Unidos.

“Cada centímetro de cobertura de los periódicos, cada minuto de la televisión y la radio sobre los Cinco Cubanos y su misión antiterrorista y la campaña por su libertad ha sido una lucha. Es por eso que decidimos sacar un anuncio de página completa en el Washington Post , para exigir que la clase política, desde el presidente Obama hasta los miembros del Congreso y el Departamento de Justicia, que corrijan esta terrible injusticia y liberen a los Cinco”, dijo Gloria La Riva, coordinadora del Comité Nacional. “Estamos profundamente agradecidos a tantas personas que ayudaron a que la publicación de este anuncio se haya hecho posible”.

El Comité Nacional publicó su primer anuncio de página completa en The New York Times el 3 de marzo de 2004, en lo que era hasta ese momento la mayor exposición del caso de los Cinco en los medios de comunicación. Desde entonces, ha publicado anuncios en otros, y llevado a cabo numerosas conferencias de prensa como parte de una estrategia de medios para romper el muro de silencio que rodea el caso.

The Post es el periódico más leído en Washington, DC, y el sexto periódico más grande del país. Su circulación impresa diaria es 545.345 y se estima que tiene unos 1.080.000 lectores diarios. Según la empresa Nielsen Ratings, es el periódico más leído en el Congreso, en el Poder Ejecutivo, y en Washington, y el único periódico que los líderes políticos en Washington leen en un día ajetreado.

“Difundir al pueblo de los EE.UU. sobre el injusto encarcelamiento de los Cinco Cubanos es la tarea más importante para ganar su liberación”, dijo el miembro del Comité Nacional Chris Banks.

Los recursos de hábeas corpus para Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio se están llevando a cabo en el sur de la Florida, en el tribunal federal de distrito. El apoyo a las acciones, protestas y foros se multiplican en todos los continentes y a través de los Estados Unidos.

(Tomado de Cubadebate)

 




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